Podría decirse que lo que nos define como humanos es nuestro comportamiento social y cómo interpretamos nuestra interacción con el entorno que nos rodea, pero todo a nuestro alrededor está en constante cambio y lo definimos como tendencias, puede ser sobre lo que pensamos como sociedad, lo que nos gusta, lo que está bien o lo que está mal; estar a la vanguardia de estos cambios aunque sea un esfuerzo constante y desgastante, nos permitirá ser estratégicos y consecuentes ante cualquier aspiración de entender nuestro rumbo social.
El registro de estos cambios sociales es nuestra historia como país, familia y personas, nos permite saber de dónde venimos (nuestro pasado), todos los días se crea nueva información que está en constante transformación y dependiendo de la relevancia que tenga puede llegar a definir nuevas tendencias, la información está en todas partes y nuestra capacidad humana de documentar su comportamiento nos permite analizarla (big data).
En los fenómenos naturales donde conceptos como la gravedad, fuerza electromagnética o la luz son fenómenos naturales que promedio de matemática (números, ecuaciones, estadística, análisis) llegamos no solo a entender su comportamiento sino que inclusive podemos empezar a predecir de forma muy precisa su comportamiento al interactuar con otras variables.
Con los fenómenos sociales ocurre lo mismo, identificamos la mayor cantidad de variables que juegan un papel en el constante cambio social (gustos, tendencias, interacciones, política, economía, etc) para así poder empezar a entender un poco mejor cuales son esas variables que más influyen en estos cambios, pero la complejidad social de nuestra cultura como humanos es demasiado intrínseca, por lo que al documentar y robustecer los métodos bajo los cuales analizamos y buscamos comprender estos fenómenos sociales nos permite poco a poco acercarnos más a un modelo bajo el cual no solo entendamos estos cambios sino que podamos anticiparnos y predecir de cierta forma el comportamiento futuro de los fenómenos sociales de nuestra cultura (tendencias).
Los resultados en marketing siempre estarán definidos por lo acertado que resulte el esfuerzo de comunicación ante el momento único en el que se encuentre el mercado, por lo que en la consideración, planeación y ejecución de estrategias de mercadeo digital resulta fundamental considerar estas variables si se quiere tener un impacto real en el público objetivo.
El entendimiento de la repercusión que tiene el Big data sobre la sintetización de nuestro comportamiento social e individual, puede llegar a ser usado para sugestionar masivamente ideales, percepciones o inclusive incitar comportamientos. Ahora bien, si aplicamos esta herramienta en un esfuerzo de profundo entendimiento en el comportamiento del consumidor, empezamos a identificar patrones de conducta, variables en la toma de decisión, valoraciones de percepción, prácticamente las posibilidades son casi infinitas en términos de la información que se puede documentar y analizar, por lo que resulta fundamental saber qué variables son las que más determinan e influyen en el comportamiento que se quiere analizar y cómo se puede potencializar el mismo en pro de un objetivo.